Programas de formación continua reducen los errores preanalíticos1.
La alta rotación del personal hace que sea necesario una formación frecuente1
La rápida evolución del entorno regulatorio y el hecho de estar al día con las últimas tecnologías de diagnóstico pueden dificultar el cumplimiento de las normas y la eficacia.
Una pandemia puede aumentar las consecuencias negativas por las ineficiencias y los errores de diagnóstico, lo cual provoca más estrés en el personal de laboratorio
Necesidad de tiempos de repuesta rápidos y resultados diagnósticos precisos
La fase analítica es el elemento central de los diagnósticos de laboratorio y está en constante desarrollo para lograr pruebas más precisas.
La normativa en constante cambio y las nuevas tendencias tecnológicas exigen una actualización continua. Las tareas manuales pueden ralentizar el tiempo hasta el resultado. Las posibles soluciones, como la automatización del laboratorio, requieren los servicios de especialistas en optimización de procesos.
Desde la identificación del paciente, el transporte y la clasificación, los estudios ponen de manifiesto que en la fase preanalítica es donde se producen más errores de todas las etapas del proceso diagnóstico, ya que en ella se producen alrededor del 62 % de todos los errores de diagnóstico.2,3
Con una proporción significativa de diagnósticos médicos basados en los resultados de las pruebas analíticas,2 los errores preanalíticos y las ineficiencias pueden tener un impacto negativo en la atención al paciente.3 Se necesitan intervenciones para garantizar las buenas prácticas preanalíticas.
Con el fin de interpretar de forma eficaz los datos en la fase postanalítica, se deben emplear las herramientas y la experiencia adecuadas.
La falta de datos integrados puede impedir que los médicos reciban a tiempo los resultados correctos de las pruebas. La trazabilidad, la elaboración de informes y los análisis requieren conocimientos especializados para su correcta aplicación y una supervisión constante que garantice la seguridad y la actualización de las prestaciones.
El paciente está en el centro de todo lo que hacemos en la atención sanitaria, y el objetivo es mejorar los procesos y los resultados para su beneficio.
Desde la toma de muestras hasta los resultados y el tratamiento, las necesidades del paciente son primordiales. Al garantizar el valor y las buenas prácticas a lo largo de estas fases se puede garantizar la seguridad del paciente y el tratamiento adecuado.
Si no se abordan correctamente, los problemas que surgen a lo largo del proceso diagnóstico pueden dar lugar a resultados clínicos negativos.4
Un laboratorio optimizado surge cuando las soluciones tecnológicas de alta calidad se combinan con procesos eficientes y equipos implicados: afrontando los retos en el proceso diagnóstico directamente, con las herramientas y la formación necesarias para llevarlo a cabo.
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Obtenga más información sobre el impacto del mapeo de procesos en la gestión de los pacientes y los plazos con los ponentes, Adam Stretton, director de Asuntos Médicos Europeos de BD, y el Dr. Juan González del Castillo, consultor jefe en el servicio de urgencias del Hospital Clínico San Carlos de Madrid.
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